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Valencia.- Representantes de distintos gremios de la salud en Carabobo protestaron este 17 de junio frente a la Plaza Cristóbal Mendoza, conocida como Plaza Drácula, para exigir se incrementen los puntos de vacunación contra el COVID-19 en la región, que dicen son insuficientes para la demanda de vacunas.
El representante de Médicos Unidos en Carabobo, Jorge Pérez, señaló que hasta la fecha no hay cifras exactas de cuántas personas han recibido las dosis anti COVID, ni un número preciso de puntos de vacunación. Considera necesario que se publique la data de las personas vacunadas para garantizar la transparencia y control del proceso.
“Basta de improvisar, exigimos que se abran puntos de vacunación en todo el estado, vemos como en otros países hay centros de vacunación hasta en playas, centros comerciales, automercados, etc. Tenemos 76 miembros del sector salud en Carabobo fallecidos con sintomatología COVID-19 y no están reportados en las cifras que se dan a diario, somos necesarios para el pueblo pero invisibles para el Estado”, expresó Pérez.
El presidente del Colegio de Enfermeros de Carabobo, Julio García, rechazó que las personas, en especial los adultos mayores, tengan que hacer largas colas para vacunarse o caminar largos trayectos para llegar a los pocos centros de vacunación que dijo se contabilizan en la entidad.
“Hay hacinamiento en las colas, si se abren más centros de vacunación no pasa eso, algo que sabe hacer este Gobierno es poner a la gente a esperar en colas, pasas en la mañana, al mediodía, en la tarde y vemos más de 150 o 200 personas esperando cuando pueden abrir más puntos para vacunar”, dijo el dirigente gremial.
A la protesta se sumaron habitantes del norte de Valencia, quienes manifestaron preocupación por la desinformación que dijeron existe en los procesos de vacunación. También demandan servicios públicos eficientes para garantizar las medidas sanitarias y la movilización hacia los centros de vacunación.
“Hay un grave problema de movilización, la falla de combustible no nos permite movilizarnos y si tuviésemos la certeza de que el día que nos citen vamos a recibir la vacuna, pero tenemos que ir dos y tres veces ¿Y la gasolina? No es solamente el costo, sino el tiempo que invertimos en cola para poder equipar los vehículos”, dijo Felicita Rojas, habitante de El Trigal.
La señora Claudia también se pronunció para rechazar las condiciones en las que se lleva a cabo la atención de la pandemia en el país.
“No hay servicios básicos, para surtir gasolina en dólares duramos dos, tres, cuatro días, llegamos a la casa y no hay agua para la higiene. Yo me registré, registré por dos vías y nada, mande mi mensaje y me dice que no tengo cita asignada. Yo soy sostén de familia, no tengo recursos para pagar 3.000 dólares diarios en una clínica, tampoco para estar en un CDI y menos en casa que tengo a mis padres que son mayores, ya los registré y no han salido”.
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