Maturín.- Las cifras rojas de la desnutrición siguen aumentando en el estado Monagas. En solo siete días de febrero ya se han muerto 16 lactantes por esta causa en la emergencia pediátrica del Hospital Universitario Dr. Manuel Núñez Tovar, en Maturín.
El caso más reciente ocurrió el 6 de febrero. Era un bebé de dos meses que recibió poca lactancia materna y nutrición complementaria. El paciente ingresó a la emergencia pediátrica con un cuadro de diarrea agudo y deshidratación severa. Tenía desnutrición moderada.
La cifra supera la cantidad de fallecimientos por esta causa registrada en enero, cuando 12 bebés murieron por causas similares. El mes pasado, nueve de las víctimas tenían menos de seis meses y pesos de tres kilogramos, mientras que los otros tres tenían un año y pesaban menos de cinco kilos, el equivalente al de un bebé de dos meses de nacido.
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Entre enero y lo que va de febrero los decesos suman 28 casos, más de la mitad de los que se contabilizaron en 2018, que cerró con 54 muertes solo en la emergencia pediátrica. 70 % de los decesos actuales, es decir, siete de cada diez, corresponden a Maturín, seguido de Caripito, municipio Bolívar.
El aumento de los casos mantiene preocupados a los especialistas de la sala de emergencias pediátricas, quienes explican que la mayoría de esos bebés nunca recibió lactancia materna. Se mantiene el patrón de alimentación: agua de avena, de arroz o de maicena.
Estadísticas internas del centro asistencial refieren que nueve de cada diez pacientes pediátricos tienen problemas de malnutrición severa, pues el nutriente que más consumen es el carbohidrato, que lo único que hace es «inflarlos», según han explicado especialistas del servicio.
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