Foto: cortesía
La Misión Barrio Adentro nació en 2003 como una de las principales banderas del oficialismo. El plan era dotar a la población con centros de atención primaria en las comunidades, con médicos que realizarán visitas casa por casa y así descongestionar los grandes centros de salud.
En 2020, durante los primeros meses de la pandemia, Nicolás Maduro resaltó la labor de estos ambulatorios para atender la emergencia del coronavirus.
Dos años más tarde, la administración de Maduro se olvidó de fortalecer y dotar de insumos estos establecimientos, por lo que los venezolanos ya no pueden contar con ellos.
«En el CDI (Centro Diagnostico Integral) de Cariaco no contamos con medicamentos para los contagiados de COVID y tampoco se nos entrega guantes. Estamos comprando todo lo necesario», dice un mensaje recibido por el equipo de El Pitazo.
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El 27 de enero trabajadores del ambulatorio Dr. Humberto Fernández Morán, ubicado en Las Adjuntas, realizaron una protesta en rechazo a las condiciones de trabajo.
De acuerdo al director de la ONG Médicos Unidos, Jaime Lorenzo, la situación con estos establecimientos de Barrio Adentro es crítica. Denunció en una entrevista para Unión Radio que 92% de los centros de atención están cerrados.
Este panorama es desalentador para los ciudadanos que no cuentan con los recursos suficientes para pagar la medicina privada y tampoco cuentan con una red de salud pública capaz de atenderlos.
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